Comité alfareras de Quinchamalí

Alfarería

Chillán, Ñuble, Chile

    El amplio repertorio de producción de esta agrupación incluye piezas decorativas como pesebres, pavos, gallinas, chanchos y las famosas guitarreras; como también piezas utilitarias en el que se cuentan mates, ollas, platos y una serie de otros contenedores con formas zoomorfas.

    Más de 20 personas forman la Unión de Artesanos de Quinchamalí, un pequeño poblado ubicado en la Región de Ñuble que se caracteriza -desde hace generaciones- por su tradición alfarera.

    Las piezas en greda que realizan estos artesanos preservan la tradición del trabajo completamente hecho a mano y cuyo sello de identidad es el color negro característico de su cerámica, así como sus decoraciones florales que se realizan a través de incisiones en la superficie de la obra. “Nosotros trabajamos con greda amarilla, que es más consistente y firme. El color negro final de las piezas se le da en el proceso de cochura de la greda. Cuando la pieza está al rojo vivo se saca y se introduce en guano de caballo, seco y molido. Con eso, la greda se tiñe de color negro. Luego de eso lustramos la pieza con enjundia de gallina o pata de vacuno y posteriormente con la aguja de una victrola, hacemos un trabajo de esgrafiado, dibujando flores y espigas que quedan en una tonalidad blanca”, detalla Mónica Venegas, artesana de Quinchamalí.

    Recorre el Taller del Comité alfareras de Quinchamalí