Taller familiar de platería tradicional cusqueña, en Perú, con más de 50 años de historia, integrado por Gregorio Cachi Palomino, Gran Maestro de la Artesanía Peruana e Iberoamericana- y sus hijas, quienes preservan la tradición familiar en el oficio.

Su padre les enseñó el arte de la platería, metal que obtienen en procesadoras de Lima y que trabajan en la técnica ancestral de vaciado y modelado en arcilla.

Con diseños coloniales y contemporáneos, confeccionan una diversidad de aretes, anillos, collares, relicarios, broces, pulseras y tupus incas, entre otros, con iconografías de la región, que además de plata incluyen piedras naturales, nácar, madera, textiles y semillas.

Hilda Cachi, la mayor de las tres hermanas del clan ha recibido varios premios entre los que destacan: el Reconocimiento UNESCO para la Artesanía Región Andina 2014, la Medalla Joaquín López Antay 2015 y Gran Maestra Regional de la Artesanía Cusqueña 2015.